Disponer de un acceso al agua potable resulta de vital importancia para el ser humano, es esencial para nuestra supervivencia.
Desde los principios de la existencia, el hombre siempre buscaba un punto de acceso al agua potable para establecer su residencia. Esta situación no ha cambiado siglos después. En la actualidad la misma Organización Mundial de la Salud (OMS) considera de que existe un punto de acceso al agua potable cuando está a menos de un kilómetro del lugar de residencia. Además considera punto de acceso cuando pueda suministrar un mínimo de 20 litros por persona y día.
¡Que afortunados somos que no tenemos que desplazarnos para conseguirla y disponemos de toda la que necesitamos! OJO, no hay que malgastarla, es finita.
Características del agua potable
El agua debe de tener unas características mínimas para poder ser considera como agua potable.
LIMPIA
Para poder ser consumida directamente y para los procesos de producción de nuestros alimentos, esta agua debe de ser limpia y segura, sin tener el riesgo de poder transmitir ninguna enfermedad.
INCOLORA
El agua en su estado correcto debe de ser incolora, transparente, aunque en algunas ocasiones, debido a los tratamientos que recibe en su potabilización, se muestra blanquecina debido a la aportación de cloro. Este se disipa cuando se deja al agua reposar.
INSÍPIDA
El agua no debe tener sabor. Si se aprecian sabores marcados en el agua, esta debe tener algún componente que debería ser revisado para garantizar el estado saludable de esta agua.
INODORA
El agua potable en un estado saludable no debe generar olor alguno.
SIN ELEMENTOS EN SUSPENSIÓN
El agua potable no puede presentar un estado de turbiedad. Cierto es que en algunos casos vemos un efecto similar por el efecto de la presión de las tuberías, o por la antigüedad de estas. Esto debería de corregirse o solucionarse.
SIN CONTAMINANTES
El agua potable debe de estar libre de contaminantes orgánicos, inorgánicos o radiactivos.
EQUILIBRADA
El agua potable debe tener un equilibrio consiguiendo mantener una proporción de gases y sales inorgánicas disueltas.
SIN MICROORGANISMOS PATÓGENOS
El agua no debe de poner en riesgo nuestra salud. Mediante un seguimiento de análisis que controlen la contaminación de bacterias coliformes y otras de origen fecal por ejemplo, debemos tener la garantía de que el agua que consumiremos estará libre de contener microorganismos patógenos de cualquier tipo.
Tan esencial como poder disponer de un punto de acceso al agua potable para nuestra vida, es el tener unos controles periódicos de la calidad del agua potable que garanticen que llega al consumidor en correctas condiciones. No siempre es así, y no siempre se realizan los suficientes controles.
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