¿Tienes problemas digestivos? ¿Qué agua y cuánta agua bebes? La falta de agua ocasiona alteraciones digestivas
Nuestro cuerpo necesita recargarse de energía diariamente. El organismo necesita abastecerse de agua, proteínas, grasas, vitaminas, minerales y carbohidratos para poder estar debidamente alimentado y vital. Pero todos estos nutrientes no pueden ser absorbidos por nuestro cuerpo directamente, deben ser transformados en un formato accesible para nuestro organismo. Los nutrientes deben transformarse en partes lo suficientemente pequeñas para que el cuerpo las pueda absorber de manera correcta y eficaz para evitar problemas digestivos.
El aparato digestivo mediante el proceso de la digestión será el responsable de esta transformación generando la secreción de jugos digestivos.
En un proceso digestivo correcto, las proteínas se convierten en aminoácidos, las grasas en ácidos grasos y glicerol y los carbohidratos en azucares simples. Una vez realizada la descomposición química necesaria para su uso, el aparato digestivo será también el responsable de la correcta distribución de todos estos nutrientes esenciales.
Existen múltiples factores que pueden provocar una mala digestión, como son:
- El consumo frecuente de alcohol
- La ingestión de demasiados medicamentos como pueden ser los antibióticos (a modo de ejemplo).
- Consumo habitual de grasas monosaturadas o trans, dulces y edulcorantes artificiales.
- Hábito de cenar tarde
- El sedentarismo o la falta de ejercicio
- La deshidratación
Todos estos factores afectan negativamente en nuestro sistema digestivo y por consiguiente en nuestra digestión. Pero quizás el que más afecta a la digestión es la deshidratación. La carencia de agua en nuestro organismo, ya sea provocada por la falta de consumo de agua o bien por un exceso de pérdida de líquido sin su correspondiente recuperación y equilibrio provocaran una severa afectación al aparato digestivo y a todos sus procesos. Si los niveles de agua no son los adecuados se producirá un mal funcionamiento afectando directamente en nuestra salud.
La falta de agua disminuirá la secreción de jugos digestivos. No solamente ralentizará la digestión con las consecuencias negativas que traerá en las funciones corporales de nuestro cuerpo sino que además nuestro organismo no dispondrá del líquido suficiente, y realizará una incorrecta eliminación de los desechos corporales.
Estas alteraciones provocaran desde problemas estomacales, gastritis y en los casos más extremos podremos padecer diferentes tipos de úlceras.
Una mala digestión y una incorrecta eliminación de deshechos puede ser el origen de padecer problemas intestinales tales como el estreñimiento, siendo este un grave factor de riesgo para nuestra salud general, dependiendo del tiempo que perdure y de la gravedad el problema.
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